Fabricantes de miseria.
La burla de los acuerdos de paz La arrogancia intelectual marxista se hizo presente en un escenario de por si viciado. Las ínfulas del conocimiento sobre, ¿Qué es lo que el pueblo quiere? Y el atribuirse la voz de los necesitados, oprimidos y de los sin voz, ha sido una característica del pensamiento izquierdista extremo en nuestro continente iberoamericano. Los movimientos insurgentes pro marxistas, léase pro URSS, pro China y pro Cuba entre otros, fueron los arrogantes del pensamiento sobre el desarrollo y las políticas sociales. Con un elaborado discurso, por cierto impulsado por falacias ad misericordiam y ad populis, fueron construidos para motivar el corazón y no la razón. Estos movimientos guerrilleros de las llamadas "revoluciones sociales" integrados en su mayoría por jóvenes de clase media estudiantes de universidades estatales y de centros educativos religiosos, identificando la pobreza como unas herramienta de concientización ideológica para encausar sus pretensi...