2016 y la esperanza del pueblo

Napoleón pronunció, ¨los politicos terminan con las esperanzas de los pueblos y los militares, recobramos el orden y el control¨ 
Finalizamos el año con una manifestación popular como pocas en la historia, un ahinco cívico de trascendencia naciona, la constancia y firmeza del ciudadano capitalino en sus inicios y la sumatoria popular posterior da origen a un desplazamiento del poder político consuetudinariamente posicionado a un nuevo escenario de incertidumbre y vislumbramiento, se rompió la sucesion paradigmática del poder político y surge una nueva ruta de acción y social,  con una elección poco usual, atípica pero que más que opción es una desilucion y un basta ya de tanto engaño. 
Las decepciones políticas estan por doquier en los procesos de conformación democrática y de fortalecimiento republicano.
Muchos son los que se llaman democráticos y pocos los constructivos, la izquierda demagógica fraudulentas y tipo radical, se avalancha sobre el poder, cuestionando un sinfin de falacias capitalistas, pero olvidando sus desavenencias y fracasos, su formaciòn antidemocatica y pluralista, son por excelencia dictatoriales y anti libertades, buscan el sometimiento y acondicionamiento de la voluntad popular, son sin lugar a dudas, su mayor fracaso. 
La indominia se manifiesta y el oportunismo, es preclaro su actitud de aborazamiento el que prevalece y su afán de descrédito el que impera. Son su imperfecciones ideológicas y formativas las que renace y se manifiestan, conllevando su fracaso popular. 
Los nuevos escenarios iberoamericanos confirman su deterioro y fracaso conceptual, los perturbadores razonamientos y sus consabidos manejos publicitarios. 
Que demandan nuestras sociedades, cuál es el camino a la riqueza y el abandono de la pobreza. Cuál es la ruta a la prosperidad. Son las respuestas que se demandan, pero con objetividad, concordia y realismo, el escenario está orientando a un bando del ¨novel utopismo socialista ¨ .  
Pueblo engañado, promesas y saqueo, confrontación social, escaramuzas cada vez más violentas, linchamientos, desencantos políticos y por sobre todo anarquismo de la manifestación social. 
Se retoma la victimizacion social, se niegan los espacios de crecimiento y prosperidad grupal, las emprendadurias naturales y se pretende adoptar patrones comunales de desarrollo , nada más nefasto.  
La manifestación fue democrática, mantengámonos al margen de la construcción socioografica, y la retórica politiquera y demagógica.  





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